El Tribunal de Justicia de Chubut condenó al femicida de Débora Gisell Martinez a prisión perpetua.
El femicidio ocurrió el 27 de enero de 2017 en el barrio Próspero Palazzo, cuando Néstor Alberto Aguilante la agredió mediante golpes de puño y con algún objeto contundente y finalmente la asfixió. Todo ocurrió en el domicilio donde convivían hace dos años.
La Fiscalía entendió que el ataque se produjo como conclusión de una relación signada por violencia de género, en la que Martínez se encontraba en una situación de subordinación y sometimiento hacia Aguilante, basada en una relación desigual de poder.