En Mendoza una de las provincias con más altos índices de violencia de género y femicidios, la mitad del gabinete del Gobernador radical Cornejo está denunciado por violencia de género.
Cornejo tuvo que echar a su Ministro de Salud, luego de que Laura García se presentara en la Oficina Fiscal 15 y denunciara que su entonces pareja , el ministro Rubén Giacchi le había pegado una trompada. ¿Su profesión?, médico ginecólogo.
En noviembre del 2015, un mes antes de que Cornejo asumiera, se conoció un fallo de una Cámara del Trabajo en contra de Uno Gráfica SA, empresa editora de diario Uno. La sentencia acusaba al ex director del matutino Jaime Correas de haberle causado incapacidad del 27% a una trabajadora del diario a causa de los maltratos que le propinaba. El fallo confirmó que la trabajadora de prensa en cuestión sufrió “acoso psicológico” por parte de Correas. A pesar de su antecedente Cornejo lo nombró Director general de Escuelas del Gobierno de Mendoza.
En el Ministerio de Seguridad ascendieron a un policía acusado de violencia de género. El ministro del área, Gianni Venier, y el jefe de la Policía, Roberto Munives, plasmaron sus firmas en la promoción del comisario Marcelo Esquivel como comisario general del departamento de Capital, siendo que este que no podía usar ni arma ni uniforme por estar involucrado en una denuncia por violencia de género. Fue Cornejo quien, ya con el escándalo en los medios, debió echar al uniformado.
También el subsecretario de Justicia, Marcelo D’Agostino fue denunciado por una mujer de 20 años que trabajaba en la Casa de Gobierno por violencia de género. Alejandro Jofré, ex subsecretario de Trabajo tuvo que renunciar luego de ser denunciado hace unos meses por tres empleadas de la Subsecretaría por abuso sexual.